lunes, 5 de noviembre de 2012

Cambios

Nuestra vida esta repleta de cambios, algunos son positivos, otros no tanto. De todos podemos hacer una lectura constructiva, aunque a veces resulte difícil, que nos ayude a aprender más sobre nosotros y la vida en general. 

En todas las épocas, las personas han sentido momentos de necesidad de cambio, de querer transformar lo que les rodea porque ya no les sirve, ya no les llena, y esas transformaciones pueden ser desde cosas sencillas hasta cambios más importantes. 

Cuando la necesidad de cambio es general, como esta siendo en la actualidad, también las necesidades de cambio personal se acentúan. La adaptación a los cambios, invita a hacer un análisis más personal. Todas esas reflexiones son positivas, ya que indican hacia donde queremos ir, quienes somos y tenemos más ganas de atrevernos a probar cosas nuevas, a conocernos, autodefinirnos y explorar más sobre nosotros y lo que nos rodea. 

A veces las necesidades de cambio pueden llevarlos a sentir miedo, ansiedad y dudas sobre lo que sentimos. Pero esto no tenemos que verlo como algo negativo, ya que el miedo es algo natural. Lo importante es vencerlo, animarnos a seguir nuestros instintos, a cruzar esas barreras que nos hemos impuesto o a veces nos han impuesto y lanzarse a conseguir nuestros deseos. 

También la edad y las diferentes etapas de la vida,( los 20, los 30, los 40,….), nos animan a esas transformaciones. Lo que a los 20 no veíamos o nos atrevíamos a hacer, lo intentamos hacer a los 30 o a los 50, da igual, pero sentimos esa fuerza para transformarnos. 

Desde nuestro nacimiento los cambios son algo constante en nuestras vidas. Posiblemente una de las mayores transformaciones se de en la adolescencia. Estos cambios no sólo son físicos, también lo son a nivel social, intelectual y emocional. En esta etapa comenzamos a diferenciarnos de la familia, buscamos nuestra identidad y la vida nos dará oportunidades que nos permitirán asentar las bases de nuestra vida de adulto.

A partir de ahí, los cambios a todos los niveles, se continuarán dando y en cada etapa buscaremos retos diferentes, ya sea emanciparnos de la familia, vivir en pareja, cambiar de trabajo, separarse, tener hijos, cambiar de ciudad…infinidad de posibilidades, todas ellas, dirigidas a hacernos más felices y sobre todo crecer como personas. 

Como todos sabemos, a veces algunos cambios, son difíciles de digerir, porque quizás no los hemos provocado nosotros y nos vienen impuestos, ya sea por la propia vida o por las decisiones de los demás. Y no debemos de olvidarnos, que todos los cambios que hacemos influyen en los demás y viceversa. 

Desde aquí, desde mis propias experiencias de cambio, os animo a que sigáis esas intuiciones que creemos nos hará felices, porque son las que al final dan un sentido a nuestra vida. 

PARA CAMBIAR LO QUE ERES, CAMBIA QUIEN TE CREES QUE ERES. 
Jonathan Lockwood Huie