Evidentemente son diversas las causas que hacen difícil o
incluso imposible la paternidad, a veces estas causas son puramente físicas,
pero en otras ocasiones, la razón está más relacionada con la psique, con
nuestra forma de vida y con nuestro nivel de ESTRÉS.
Al adentrarnos en la relación entre fecundidad masculina y
estrés, lo primero que debemos preguntarnos es: ¿como funciona el sistema
reproductor masculino? El cerebro masculino libera una hormona llamada LRHH
(hormona liberadora de hormona luteinizante), que estimula la pituitaria para
que se libere la LH (hormona luteinizante) y la FSH (hormona estimulante de los
folículos), esta a su vez estimula a los testículos para que segreguen la
testosterona y se active la producción de esperma.El mecanismo está claro, el problema es cuando tenemos estrés, ya que ésta situación inhibe todo el sistema. El estrés disminuye la concentración de LRHH así como
Las heridas, el hambre, las enfermedades, el estrés psicológico…disminuyen también el nivel de testosterona.
En cuanto a la relación entre erección-estrés,
hay que tener en cuenta que para que se de una erección, tiene que activarse el
Sistema Nervioso Parasimpático (activa la secreción de riego sanguíneo en el
pene, bloqueando la vía de salida de la sangre por las venas).
Pero, si estamos
en una situación de nerviosismo o
ansiedad no se puede establecer la vía parasimpático, causando problemas de
erección, produciéndose así la impotencia.Imaginemos que alguien se lo pasa muy bien controlando, controlando con el parasimpático el pene y de repente se pone nervioso o preocupado, zas!!, cambia del parasimpático al simpático de forma rápida y tenemos: la eyaculación precoz.
Georgina Trillas
Psicóloga especialista en enfermedades psicosomáticas